
Oranjestad - Según la parlamentaria Jennifer Arends-Reyes, que siempre ha tenido una gran afinidad con el pilar económico de Aruba, el turismo, la isla se encuentra en un punto de inflexión crucial. A pesar de las importantes inversiones y el crecimiento del sector, ahora es el momento de encontrar un equilibrio urgente entre la estabilidad económica y el mantenimiento de la identidad y la habitabilidad únicas de Aruba.
Aruba ha experimentado un desarrollo turístico a gran escala en los últimos años, con el objetivo de atraer a más visitantes y fortalecer la economía. Ahora es el momento no sólo de salvaguardar el empleo, sino también de invertir en infraestructuras, mantenimiento del destino y proyectos de renovación como Port City y el desarrollo de San Nicolás.
La colaboración con partes interesadas como la Autoridad de Turismo de Aruba (ATA), la Asociación de Hostelería y Turismo de Aruba (AHATA) y la Autoridad Aeroportuaria de Aruba (AAA) es crucial para posicionar a Aruba como un destino que crea conciencia en torno a la conservación, la cultura y el compromiso de la comunidad. "Nuestra población local tiene historias que contar, talentos que compartir, y si los aprovechamos también podemos impulsar la economía creativa", afirmó Arends-Reyes.
También subraya la importancia del turismo responsable, en el que los visitantes no sólo contribuyen a la economía, sino que también muestran respeto por la naturaleza y la comunidad. "El turismo es hospitalidad y calidez, y tenemos que hacer que nuestros visitantes sientan que no sólo son bienvenidos, sino que también pueden tener un impacto positivo durante su estancia en nuestra isla", afirma.
Invertir en las personas: el futuro del turismo
Uno de los pilares fundamentales del turismo sostenible es la inversión en capital humano. Arends-Reyes pide a los propietarios y gestores de hoteles que inviertan más en sus empleados, su salud, su familia y su educación. "La responsabilidad social de las empresas debería desempeñar un papel más importante. La calidad de vida y el trato de nuestra comunidad local deben ir de la mano de la experiencia de nuestros turistas", subraya.
Para 2025, la AHATA aspira a mantener una tasa de ocupación de 81% y mantener el actual ingreso por habitación disponible (REVPAR) de $297,51 o superior, lo que ayudaría a compensar los costes de explotación. Al mismo tiempo, es necesario desarrollar estrategias para hacer frente a retos como las limitaciones de capacidad y los riesgos geopolíticos en la región.
Arends-Reyes subraya que el éxito del turismo no sólo se mide por las tasas de crecimiento y ocupación, sino también por los cambios positivos que percibe la comunidad local. "Si creamos una responsabilidad compartida, en la que tanto turistas como lugareños se beneficien, construiremos un futuro sostenible y próspero para Aruba".